domingo, 21 de febrero de 2010

Se inunda el Pago Las Minas



Desde hace varias semanas, como todo el mundo sabe y ha apreciado, no ha dejado de llover en toda Andalucía. Pero la lluvia se ha cebado en nuestra localidad especialmente con algunos vecinos. Es el caso de nuestro barrio, el Pago Las Minas. El abandono secular de esta barriada periurbana en la que viven personas se ha mostrado más evidentemente en estos días en que el agua ha alcanzado una altura demencial. Al menos cinco familias han visto anegarse su vivienda habitual. Y todos los invernaderos han perdido la producción. El ayuntamiento ha tardado al menos cinco días en percibir la necesidad de ayuda de estas familias y ayer domingo mandó una dotación de bomberos que hicieron lo que pudieron porque la inundación era ya incontrolable. Consultados los moradores más viejos del barrio, la reciente construcción de viviendas en el Camino Santo Dios, ha cerrado el curso natural del agua. Con los acuíferos repletos, el nivel freático a tope, el recorrido tradicional de este excedente hídrico cortado en seco, las familias se ahogan. A este panorama catastrófico hemos de sumar el número de alcantarillas fluviales de la calle. Ninguna.
Estas nuevas viviendas proyectadas y homologadas por el ayuntamiento no cuentan con alumbrado ni pasos de cebra ni el menor rastro de acerado ni de alcantarillas. Es por lo tanto una zona urbana salvaje que está fastidiando el curso natural del agua de lluvia. Al final siempre son los mismos los fastidiados por la inoperancia y la ignorancia de constructores, proyectistas y de la propia Gerencia de Urbanismo que pilla el dinero y mira para otra parte.

viernes, 19 de febrero de 2010

Un mundo para Okada



En todo libro hay un cuarto oscuro. Al principio llamamos a la puerta, leemos el título que dice Gran obra el pensamiento etrusco. Y creemos que dentro hay gente, personas, máscaras y pasamos la portada pensando que hemos entrado en una habitación. A oscuras, en la penumbra que propicia la ausencia total de ventanas y rendijas, tenemos que ir encendiendo personajes, luces, ideas de la cosa y, sin querer, estamos imaginando, fabulando sobre lo que no hay, sobre esas letras etruscas que leídas una tras otra hacen palabras, que pensadas en voz baja hacen frases y abstraídas ideas y texto ridículo, o novella al estilo compadre, motivo por el cual no todos llegan a la categoría de best seller, aunque sí a la de libro con grapas. Ediciones amigas, autoediciones. Pero el orgullo obrero del letrista de carnaval o del guionista de TV, están por encima del dolor de la ignorancia del gran público, ese gran prostituto de la flojera intelectual, que pretende que el wifi o el espíritu santo le transfiera la gran sabiduría de aquellos libros griegos pasados por Etruria al alfabeto latino. O las porciones fileteadas del Quijote de Okada, el Quijote en Japonés con pictogramas de kung fú.


Kiwi en la TV


Un matrimonio aplaude a Kiwi, la gran surfera neozelandesa. Son dos en pareja. Par doble de un medio. Dos. Multiplicados por la presión fiscal, unocomadós. A los que amortizando el doscomadós porciento de interés inverso, queda uno. Iba uno por la Gran Vía y cayó en la boca del metro
Sevilla. Nemo. Cero personas. Nadie. Iba nadie por la calle y se encontró con alguien. Y ese alguien que conmina a su espíritu a multiplicarse se bifurca moralmente en cuerpo y alma. Dúo. Dos. Cuerpo y espíritu se toman unas cañas en la esquina de Cervantes con Garcilaso. A la salud de Kiwi esa gitana pelirroja maorí que se desliza por la pantalla de plasma poniendo en riesgo la integridad de los moradores del bar con su tabla de snow board.

Cigarrillos ingleses

Cuando el combustible echa fuego es porque arde. Y la luz y los elementos se encienden. Se hace la luz del día.
El sol joven y fuerte, como dijeran la Lole y el Manué. En una peli de Tarantino, las agujas del reló van patrá porque están siendo reflejadas en un espejo. Las horas pasan lentas a la espera del juez, porque trae el veredicto en un perfecto inglés. Los narcos llanitos, gibraltareños, circulan por las rotondas en sentido inverso a las agujas del reló porque en su país las motocicletas llevan el manillar a la derecha. El Big Ben de Algeciras son las altas torres de Hércules pero sin reló, se le ha quemado la maquinaria y echa fuego o jumo. Jumera garantizada a los viandantes.


Disfrutando del dolor ajeno

Como soy egoísta ni te miro ni te ayudo ni te presto mi hombro para que plañas. Pero como mi cultura y mi pueblo llevan prodigando tantísimos y antropológicos milenios la caridad hipócrita, seré amable y tangible a tu necesidad perentoria de que sea tu vecino. Y te quiero y te ayudo. En el monte Wu hay un monje que se acostó sobre un lecho de flores y se convirtió en flores, fruto, cómo no, del mimetismo taoísta.




viernes, 12 de febrero de 2010

La Crisis llega al Convento de Santa Cruz en Córdoba


Anuncian el cierre del convento de Santa Cruz tras 545 años
La hipoteca sobre el inmueble, la crisis y el alto coste de conservación hacen inviable mantenerlo.Sus 6.000 metros albergan joyas del barroco y el renacimiento, aunque en gran parte está ruinoso. Lo que no consiguió la desamortización de Mendizábal, los ejércitos de Napoleón, los ataques anticlericales del pasado siglo o las hambrunas en medio milenio, lo va a conseguir la actual crisis bancaria: cerrar el convento de Santa Cruz de las clarisas franciscanas tras 545 años de existencia en Córdoba.
Las 17 monjitas se preguntan qué hacer para pagar la electricidad porque están heladas y no tienen dinero. Está claro que el camino para conseguir dinero es TRABAJAR, CÓÑO, LO QUE HACE TODO EL MUNDO PARA PAGAR LAS LETRAS Y LLEGAR A FIN DE MES.


jueves, 4 de febrero de 2010

4.000.000 de desatres




4.000.000 de parados

La solidaridad entendida como un horario laboral o como un descuento de los salarios no debería afectar a la economía de los contratados fijos, de los funcionarios y de los empleados de las corporaciones públicas. Pero la fe en los demás no existe y parece que en tiempos de crisis nos volvemos especialmente egoístas para con los que, desgraciadamente, están empezando a carecer de sueldo y del cualquier tipo ayuda. A continuación vendrán, como ya vimos en momentos previos a la puñetera burbuja inmobiliaria, familias desestructuradas, jóvenes tirados al menudeo con drogas, delincuencia abundante y un enrarecido ambiente de violencia social. Yo desde luego, llegado el caso de verme sin sustento, buscaría a aquellos que sé que se largaron con la pasta y me dejaron con el culo al aire, empresarios, intermediarios, especuladores y especialmente a la banca choriza y ladrona de este país de santos inocentes. Porque ese dinero, que entonces fluía y corría a raudales por todas las calles de Sanlúcar, tumbando viejos ejemplos del patrimonio arquitectónico a cambio de modernas construcciones que hoy están vacías, sin ocupar o abandonadas por la imposibilidad de soportar la hipoteca (a 50 years only), ese dinero, insisto, en algún sitio estará guardado o enterrado, escondido a la espera de mejores tiempos para la especulación. Y mientras tanto el gobierno se cierra en banda y dice que la culpa de la crisis la tiene la jubilación a los 65 años, poniendo como ejemplo la consabida comparación del albañil en el andamio y el maestro ante la pizarra. Seremos solidarios pero no gilipollas al admitir la necesidad de colaborar contra la crisis que padecen los olvidados de siempre, los pobres, pero pensar que vamos a currar con alopecia en los güevos, eso no se lo cree ni el ministro de trabajo ni san Judas Tadeo. Hace apenas tres años, los funcionarios éramos unos estúpidos que trabajábamos por 1800 euros, cuando un currito de la construcción ganaba 3000 eurazos poniendo ladrillos. Hoy los funcionarios somos los culpables de esta crisis porque nos chupamos los impuestos de los contribuyentes. A mí no me trae sin cuidado esta jodida crisis, pero yo no la creé ni la inventé y mi solidaridad no raya en la estulticia. Los ladrones están en otro lado, agazapados y embozados para chuparle el cuello a los futuros gilipollas de este castizo país de ladrones. Fdo.: Josegura